Cuelga el móvil mientras la sonrisa que tenía hace un instante comienza a desaparecer.
- Soy tonta. Soy tonta. Es que soy muy tonta - se dice a sí misma una y otra vez en voz alta.
- Eso no es verdad - responde su amiga mientras mira al cielo pensativa, intentando comprenderla, apoyarla; igual que ha hecho siempre.
- Sí que es verdad. En cuanto me dice te quiero cedo a cualquier cosa que me pida - responde tapándose la cara avergonzada.
- Eso no es ser tonta. Simplemente sientes y sentir no es nada malo. Al contrario, significa que estás viva - sabe que su amiga no es tonta, si fuera así la mayoría de personas lo sería.
- Cierto. Eso está bien, salvo cuando los sentimientos comienzan a controlar tu vida. Por eso soy tonta. No hay otra explicación - suspira resignada.
La otra chica, su amiga, calla. Y en silencio continua observando el cielo. Contra eso no puede rebatir. Es cierto que una cualidad que caracteriza al ser humano son sus sentimientos y puede que debido a ellos, a lo indispensables que puedan llegar a ser, atemos nuestra existencia a ellos, nuestras acciones, nuestras decisiones. Tal vez su amiga tenga razón. Tal vez sea tonta. Tal vez ella misma sea tonta. Tal vez todo ser humano lo sea. Al fin y al cabo, ¿quién no se ha dejado llevar por sus sentimientos al menos una vez en su vida?
Suspira. Vuelve la cabeza y mira a aquella que está a su lado que como una niña impotente continúa tapándose la cara. De pronto, esa niña comienza a reír, primero susurrante más tarde a carcajadas.
- Sí, soy tonta. Lo soy. Y no hay nadie que me lo pueda negar, pero... Le quiero. Y eso, tampoco lo puedo cambiar.
"La vida implica actuaciones estúpidas.
Dejarse arrastrar por los sentimientos.
Pero sobretodo, significa SENTIR, con estupidez o sin ella, da igual de qué manera lo hagas porque nadie podrá cambiar jamás esas sensaciones, nadie podrá hacerte olvidar y nadie podrá arrebatarte lo más bello de los sentimientos, el haberlos sentido, el hecho de VIVIR."